jueves, 27 de diciembre de 2012

A Través del Pensamiento



A ver...

Sin limitarme mucho...

Imaginando
y teniendo en cuenta 
los limites de la realidad
al verte,
 y pensarte ...

y querer tenerte... 

no sólo para mi pensamiento, 
sino también para mis manos.

Sentirte
Emocionarte
y lograr que tu imaginación
 se torne en realidad.

En los pensamientos 
que fluyen con el momento
y las sensaciones de temor 
que logran pasión.

Perder lo que las circunstancias
 nos obligan a encontrar
y encontrarte
 en lo que no quisiera perder

y que tu mirada no sólo emane
 lo que en tu corazón se refleje
sino que también, devore con su vista
 lo que a su caminar desea

Sin limitarte
Imaginando

y plasmando con tus manos... 

esas emociones, que se trasmiten
 como sueños perdidos y olvidados.

y mas que sensaciones de vida,
 alegrías del corazón
hasta que no podamos parar 
lo que en principio originamos
y sin llegar a su final
 tal cual se ha planeado
dejando que, entre telones,
 el recuerdo no sólo permanezca 
como un suspiro del tiempo

sino que se viva 
cada vez que se recuerde

 a través del pensamiento.

sábado, 22 de diciembre de 2012

El Camino de Regreso


Muy difícil había sido el camino de regreso que al llegar nada parecía igual.
- Simplemente al experimentar se tiene nuevas habilidades mentales, al igual que estando perdidos buscamos la manera de sobrevivir y encontrar, por lo menos, un nuevo destino. -

Aquel sitio que con seguridad no había cambiado, presentaba otros matices. El semblante de cada uno de nosotros combinaba angustia con felicidad, por un lado miedo y por otro tranquilidad. Y por un momento, olvidamos los terribles acontecimientos pasados.
- Quizá, desgraciadamente, cuando encontramos algo mejor que lo habitual no aprendemos que lo vivido vale mucho mas. Siendo en parte, la trampa que está a disposición para el que no se detiene a pensar. -

Así fue como cambiamos los atuendos de guerra y disfrutamos la libertad. Al pasar el tiempo nos dejamos de preocupar, y no desarrollamos centros de control y seguridad para estar alertas de posibles males.
- Entramos en un proceso incongruente al no estimular el pensamiento, dejando que una dosis de placer y confort apacigüe el producto de la experiencia. -

Inevitablemente, y como era de esperar, fuimos invadidos por criaturas con armas y escudos. Se veían exhaustos, pero con ambición en sus ojos y coraje en su andar. Eran semejantes a nosotros, parecidos a quienes fuimos en algún pasado; personas que lucharon contra las mismas fuerzas destructivas. Que al ver aquel mundo lleno de justicia y paz quisieron estar en nuestro lugar.
- Olvidamos que hay otros seres que, por naturaleza, viven en busca de un oasis en medio del trauma que les deja su caminar, a diferencia de otros que tienen el privilegio de buscarlo en el desierto de su ignorancia.-

Ellos querían dialogar para que se les permitiera adaptarse y ser como nosotros. Pero nuestra falsa y descontrolada humanidad quiso devorarlos como animales salvajes que no se pueden dominar.
- Nuestro SER deja de ser HUMANO, y pasa a SER SOCIAL. Una sociedad que discrimina lo que una vez fue. -

Evidentemente habíamos olvidado de dónde procedíamos, y nos vestimos y armamos igual que antes de llegar, mientras que ellos se desnudaban para ser libres y dejar la tortura en el pasado.
- Naufragamos en los mares de la intolerancia y nos convertimos en ermitaños poseedores de la única verdad. Alejándonos cada vez más de la realidad, y dejando a los demás que mueran con su necesidad. -

Finalmente, nos dispusimos a luchar. Perdiendo así la visión culturizada de aquel magnífico lugar, y con aberración destruimos lo que nos había hecho cambiar.
- Desconsideradamente forjamos conductas que van en contra de nuestra propia integridad. Una constante que varía sin control: cambiamos para mejorar y destruimos para cambiar. -


- Evolución sin control, pérdida de un gran valor -

02.11.2006


domingo, 16 de diciembre de 2012

Desiderio



   Poderosos deseos
   no apaciguan la necia inquietud,
   que de ninguna manera
   lo hará respirar.

   Por cuanto más desea:
   la pena nunca llegará a calmar,
   siendo la desdicha
   su cruel ataúd.

Satisfacciones positivas que sólo incrementan su búsqueda de más deseos, incontrolables ante la devoción que marchita el existir, incontenibles bajo la razón del porvenir. Un elixir que, en vez de dar vida, conlleva a la muerte. La muerte de pensamientos que proclaman libertad de sentir sin miedo.

Decidir entre un corazón lleno de angustia por el inagotable deseo y una mente que lo obliga a nunca desertar, fielmente mitiga su euforia con lo interminable de la satisfacción. Una y otra vez, siendo esa su declaración.

Quien se pregunta por qué estamos destinados a desear siempre mucho más, termina desatando la furia que en su interior estuvo sumergida en lechos de paz y monotonía. Intolerante se llena el vacío que deja la cruel realidad.

Hasta puede ser mas confiable el conformarse con lo que se tiene, pero sin duda la naturaleza nos lanza al más allá sin motivos... 

   Sólo hay que decidir.


- Deseando no satisfacer el deseo -


25.04.2006

viernes, 14 de diciembre de 2012

Mendigo

 
Fue aquel gran detalle
que algún día me diste
Cuando en pleno corazón
el daño supiste

Fue aquel mal humor
que algún día tuviste
Cuando entre tanto dolor
una tragedia pusiste

Fue aquel cuento pasajero
que algún día escribiste
Cuando estabas triste y sola
y gran vergüenza sentiste

Fue aquel sentimiento de amor
que algún día mentiste
Cuando en aquella labor
perderme quisiste

Fue aquel miedo profano
que algún día fuiste
Cuando mi amor insano
desaparecerlo propusiste

Fue aquel sol encantador
que algún día viste
Cuando caía la noche
tanta alegría descubriste

Fue aquel lago marchito
que algún día bebiste
Cuando la luna callaba
tú con más fuerza dijiste

Fui aquel mendigo sin ropa
que algún día recogiste
Cuando entre tanta lástima
con falso cariño lo vestiste